La producción de mejillones en peligro: La amenaza de la acidificación oceánica
La acidificación de los océanos pone en riesgo la producción de mejillones al debilitar su capacidad de fijación. Descubre cómo afecta y sus consecuencias.
La acidificación de los océanos: una amenaza para los mejillones
La producción de mejillones se encuentra en peligro debido a la acidificación de los océanos. Investigaciones de la Universidad de Washington han revelado que el descenso del pH del agua está debilitando el biso, el hilo que estos moluscos generan para adherirse a las rocas o superficies. Como resultado, los mejillones se desprenden y caen al fondo marino, convirtiéndose en presa fácil para depredadores y reduciendo significativamente su producción en acuicultura.
¿Qué es el biso y por qué es crucial para los mejillones?
Los mejillones utilizan una secreción viscosa que, al contacto con el agua de mar, se solidifica y forma un hilo resistente llamado biso. Este mecanismo les permite adherirse a superficies duras en zonas con fuertes corrientes y oleaje, protegiéndose de depredadores como peces, cangrejos y estrellas de mar.
¿Cómo afecta la acidificación del agua al biso?
La acidificación del agua está afectando la calidad del biso, haciéndolo más frágil y menos efectivo. Esto provoca que los mejillones no puedan mantenerse adheridos, aumentando su vulnerabilidad y reduciendo su supervivencia.
Impacto en la acuicultura
Las granjas de mejillones dependen de este proceso natural para su cultivo en cuerdas de nailon en balsas flotantes. Durante los seis a doce meses que tardan en alcanzar el tamaño comercial, los mejillones deben permanecer adheridos.
Pérdida en la producción
Con un biso debilitado, se estima que la producción puede disminuir hasta en un 20 % debido a la pérdida de ejemplares, lo que supone un impacto económico significativo para la industria acuícola.
Causas de la acidificación oceánica
El proceso de acidificación se debe a la absorción de dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera por parte de los océanos.
Factores que contribuyen a la acidificación
Las principales actividades humanas responsables de este fenómeno incluyen:
-
Uso de combustibles fósiles
-
Producción de cemento
-
Deforestación y otras actividades industriales
Actualmente, los océanos son un 30 % más ácidos que hace 200 años, y se prevé que al final del siglo puedan ser hasta un 150 % más ácidos, lo que tendrá efectos devastadores en la biodiversidad marina.
Impacto en la biodiversidad y economía
El pH medio global del agua oceánica se reducirá de 8 a 7.8 para finales de siglo.
Consecuencias en la producción de mejillones
En algunas áreas, como Washington, este nivel ya se encuentra en 7.8, lo que está generando pérdidas significativas en la producción de mejillones. Además, estos moluscos ya enfrentan variaciones de hasta 0.5 unidades de pH en entornos ribereños, afectando su crecimiento y supervivencia.
Alternativas y soluciones
Ante esta crisis, es fundamental tomar medidas urgentes para mitigar los efectos de la acidificación oceánica.
Medidas para frenar la acidificación
Algunas soluciones incluyen:
-
Reducir las emisiones de CO2 mediante energías renovables
-
Implementar sistemas de monitoreo de pH en granjas de mejillones
-
Fomentar la investigación en especies más resistentes, como el mejillón mediterráneo (Mytilus galloprovincialis), que ha mostrado mayor adaptabilidad
Conclusión
La acidificación de los océanos representa una amenaza seria para la producción de mejillones y la industria acuícola. La disminución de la fijación del biso podría afectar gravemente el suministro de estos moluscos, esenciales tanto en la gastronomía como en la economía local.
Cómo puedes ayudar
Si eres amante de los mejillones, una forma de apoyar esta industria es optar por productos de alta calidad, como los mejillones en conserva Espinaler, garantizando así su disfrute responsable y sostenible.
Deja un comentario